Testimonios
Me llamo Alan y voy a leer la Parashá Pinjás, que está en el libro Bamidbar (Números).
Esta Parashá trata de varios temas: el pacto de paz de Hashem con Pinjás, el censo de las tribus de Israel (alrededor de 675.000 personas), Moshé es instruido sobre cómo debe dividir la Tierra entre las tribus y las familias de Israel, las cinco hijas de Tzlafjad consiguen que las mujeres puedan heredar al igual que un hombre la porción de tierra de sus ancestros, Moshé observa la Tierra Prometida, Ieoshúa Ben Nun es el elegido para ser el líder después de Moshé e introducir al pueblo a la Tierra de Israel, y se detallan las ofrendas para las festividades.
Me interesa mucho el hecho de que Moshé observe la Tierra Prometida, ya que al final no pudo entrar y la tuvo que observar de lejos.
Se puede analizar esta situación desde dos ángulos. Uno es ver todo lo que hizo Moshé para que su pueblo pueda entrar a la Tierra Prometida. El otro es ver lo que Moshé “pierde”, por no poder entrar finalmente a la Tierra Prometida.
Me parece interesante analizar estos dos ángulos, porque Moshé siempre hizo cosas para el pueblo, los guió a todos hacia la Tierra Prometida y él mismo no pudo entrar. En cambio al pueblo le hicieron todo y si pudieron entrar. Los del pueblo representan a personas que no hacen nada, que no se esfuerzan y solamente reciben las cosas. En cambio, Moshé hizo todo para su pueblo y nadie hizo nada por él. En este momento yo me veo a mi mismo como el pueblo, ya que siempre pido que hagan cosas por mí, o que me hagan las cosas, y nunca hago cosas para los demás. Me propongo tomar el ejemplo de Moshé para empezar a esforzarme y hacer más cosas por los demás.